San Juan Sacatepéquez
Uno de estos días fuimos a San Juan Sacatepéquez, y escuchamos las voces de las comunidades que conforman ese municipio, sus pesares y sus esperanzas.
Nos dijeron que antes del año 2007, vivían las familias tranquilas en sus tierras y de su trabajo, sembrando flores. No obstante, ese año entraron personas desconocidas, cortaron sus flores y empezaron cortar sus árboles y a escarbar sus montañas. Sorprendidos ellos, fueron a la municipalidad a pedirle cuentas al alcalde de lo que estaba pasando. Éste no dio respuesta.
Ante la no respuesta de las autoridades, las comunidades optaron por juntarse para analizar lo que estaba ocurriendo y emitir un voto a favor o en contra de ello en una consulta comunitaria. Al analizar la situación, se percataron que una empresa cementera y de minería a cielo abierto estaba entrando a sus tierras con la intención de quitarles los suyo, sus montañas y sus tierras.
El voto emitido fue de 8,946 residentes con un no rotundo a la minería, conscientes que la cementera contamina, quita el agua y viola sus derechos. Únicamente 4 residentes estuvieron a favor de ese proyecto. Las comunidades organizadas llevaron los resultados de la consulta a la municipalidad, al congreso de la república y al ministerio de energía y minas. A todas estas entidades dijeron clara está nuestra palabra, rechazamos la minería y pedimos se retire el proyecto. Siguieron, ellas y ellos insistiendo en eso, con caminatas y plegarias, demandando que fuese escuchada la consulta.
Lo que obtuvieron por respuesta fue encarcelamientos y órdenes de captura, e instalación de campamentos militares en su territorio. En vez de atender los reclamos de las y los consultados, se construyó la plataforma de la cementera, se empezaron a acaparar propiedades y se inició la construcción de un anillo periférico para sacar el cemento. En vez de escuchar y atender las demandas comunitarias, con sobornos lograron que la dirigencia de las comunidades asumiera la postura de la empresa y traicionase al pueblo.
No obstante, siguieron insistentemente las comunidades en su lucha. Pusieron su denuncia ante el Relator de los Pueblos Indígenas de la ONU. Éste declaró oficial la consulta comunitaria y pidió el retiro inmediato del proyecto. Siguió la represión, el acoso, los asesinatos, la capturas, la provocación a las comunidades organizadas. Sin embargo, sembraron ellas árboles para oponerse a la tala del bosque y se declararon guardianas del bosque; salieron y levantaron su voz de denuncia en la capital; se elevaron las mujeres y transgredieron el cerco policial; marcharon por la vida, por la dignidad de las flores y por el agua; y nos invitaron que escucháramos su dolor y sus esperanzas, nos invitaron a hacernos sus compañeros /as.
Detrás de estos quebrantos hay intereses muy poderosos. Esta cementera, Cementos Progreso pertenece a la familia Novella. Los Novella, emparentados a la familia Castillo, dueños de Cervecería Centroamericana, son el gran consorcio de las castas poderosas de Guatemala.
Las comunidades invitaron al Concejo Ecuménico Cristiano de Guatemala, y éste se acompañó de uno de sus miembros, la Conferencia de Religiosos y Religiosas de Guatemala CONFREGUA, y de los Ministerios Globales y Ministerios internacionales Bautistas, ya que yo estuve presente. Las oímos y les dijimos, toda Guatemala está herida. ¿Qué les parece si nos juntamos a examinar la amplitud del asedio a los territorios? Reiteramos, las iglesias estamos con ustedes en su dolor, y seremos con ustedes, luz que alumbre tinieblas y sal que impida corrupción. Les dijimos, aquí estamos.
A ustedes que nos leen, conscientes de que la situación es arriesgada, les pedimos estén vigilantes. Sean ustedes guardas de sus hermanos y de sus hermanas de San Juan Sacatepéquez y de nosotros sus compañeros. Impidan que Caín levante su mano y asesine a Abel; sean comunidad contenedora de violencia y constructora de justicia y dignidad, hijos hijas de la paz.
Por Ricardo Mayol-Bracero
Compañero en la Misión en Guatemala:
Más información sobre Guatemala: http://www.globalministries.org/guatemala
International Ministries and Colaborador en la Misión de Ministerios Globales en Guatemala:
Ricardo Mayol ha sido nombrado para servir en el Consejo Ecuménico Cristiano de Guatemala (CECG). Su nombramiento es posible gracias a su ofrenda misionera.